EL PREMIO DEL DISCIPULO: CERCA DE DIOS Y CERCA DE LOS HOMBRES


Mc 10, 28-31
El premio de vivir segun el evangelio no es otro sino el de vivir con una fe trascendente e inmanente. El discipulo que vive bajo la ley del amor como El nos ha amado y está disponible para el servicio a los demás de forma efectiva, y no busca los primeros puestos,…. sigue la senda estrecha que lleva a la Vida segun Cristo y puede encontrar enemigos y persecución , pero genera comunidad , cooperación y bienestar. Esta es la experiencia de los santos que en la historia ha habido y el pueblo normalmente los ha venerado por ver en ellos cercania a Dios y a los hombres.
Celebrar esa doble comunion con Dios y con los hombres con el canto “Juntos cantando la alegria”