Comentario homiletico 1/6/18

En Mc 11,11-26 el evangelista junta dos relatos el de la higuera q Jesús maldice pq no da fruto y la expulsión de los mercaderes del templo.
Mirado en profundidad lo q une la higuera y el templo es que son entes funcionales. O sea q sirven solo si cumplen las funciones q se espera de ellas. Así la higuera tendrá valor si da fruto. ( Si no ,dicen q hasta la sombra q da es mala?). Tambien el templo para Jesús es funcional. Vale si sirve para dar culto a Dios en primera instancia. Pero sobre todo si nos ayuda a cumplir mejor la voluntad de Dios y ser más humanos. El templo entendido sólo como lugar de culto y no como lugar de humanización y de transformación personal podría ser hasta peligroso si llegara a ser refugio de pecadores pero no para su restauración sino para lograr su perdón momentáneo y seguir pecando libres de la conciencia de culpa.
Y es q el Culto y la Religión no pueden ser un fin en sí mismos sino medios para la santificación personal y en definitiva para nuestra más auténtica humanización . ?no es acaso por este motivo q nos repelen las personas religiosas sin humanidad (fariseísmo)como tb. las personas con “aparentes valores humanos” sin Dios ni trascendencia q en realidad esconden orgullo y auto-endiosamiento?