LOS LIMPIOS DE CORAZON VERAN EN EL HUMILDE JESUS A DIOS.


Jn 11,45-56
La profecía de Caifas Sumo Sacerdote en aquel año de la muerte de Jesús parece que representa bastante bien el pensamiento de la ortodoxia judia:
Si Jesús moría se salvaria su pueblo y llegarían a la fe judia muchas gentes de muchos pueblos según habia anunciado Isaías. Fue de esta manera como se argumentó y concluyó en la necesidad de que muriera Jesús .
Como sabemos por la historia ,la muerte de Jesús sí se llevo a efecto como recordaremos con detalle estos próximos dias de la “Semana Santa “, pero no aconteció la salvación física de Israel que fue arrasada por los romanos el año 70 y su templo destruido hasta hoy mismo.
Ayer leíamos la acusación que hacían a Jesús : “este blasfema porque siendo simplemente hombre se hace pasar como Dios”. Por esta sola Jesús ya podia ser declarado reo de muerte y de hecho pretendieron apedrearle.
Pero la sombra de duda tenia que estar en sus mentes: Juan el Bautista que era muy respetado como hombre de Dios por su vida austera y su predicación no tenia sin embargo los signos u obras que acompañaban a Jesús. Sin embargo esos signos prodigiosos- el ultimo de los cuales fue la propia resurrección o vuelta esta vida de Lázaro- era un hecho reciente y conocido. Así pues, lo que está en juego en estos momentos es la respuesta a ésta acuciante pregunta:¿quien es realmente Jesús? Jesús se ha puesto a la altura de Dios mismo llevando a plenitud la ley de Moises y lo dicho por los profetas con la Nueva Ley del amor hasta a los enemigos. Y ahora les plantea a sus acusadores que miren sus obras a ver si no son obras propias de su Padre Dios.
Y muchos empezaban a creer en Jesús . A nuestro parecer los ojos que mejor pudieron ver la auténtica personalidad de Jesús la percibieron en su humildad alejada de todo divismo que le hacia ver como “manso y humilde de corazón” ¿qué valor podía añadirse al hombre Jesús que no estuviera ya en El representado? ¿no seria verdad que Jesús era el enviado y Mesías por tanto tiempo esperado?
Quienes abrimos los ojos a esa fe en Jesús preparamos nuestras “palmas y ramos virtuales ” para aclamarle como Rey y Señor, Hijo del hombre y a la vez el Hijo de Dios .
Mañana, recordemos : hemos de levantar bien altas nuestras palmas . Jesus entra triunfante en Jerusalen montado sobre un humilde pollino. Aclamemosle con los limpios de corazón. El es el Mesías prometido.
Canto: Hosanna al hijo de David.